Mary Jose Díaz Flores
El chiapaneco Zoé Robledo repetirá como titular del Instituto Mexicano del Seguro Social al lado de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, cargo que asumió hace seis años con el presidente Andrés Manuel López Obrador y en los cuales no ha cambiado mucho, pues siguen haciendo falta los medicamentos, las citas con los especialistas son un terror; de paso se caen los elevadores y se inundan los hospitales.
Evidentemente que todos esto, es culpa de los gobiernos pasados, solo que tras seis años frente a esta institución ya no hay pretextos para lograr el cambio y el político chiapaneco ya tiene sus propios hierros, muchos de los cuales se han ventilado públicamente y tienen que ver con la corrupción que no ha dejado de ser una práctica recurrente.
Desafortunadamente para los mexicanos el famoso IMSS Bienestar, no se ha concretado, sigue en construcción, mientras que la atención a la salud no puede hacer antesala, eso sí, seguimos esperando que el sistema público de salud de la Cuarta Transformación sea una realidad y no meras promesas de campaña.
Zoé Robledo asegura en un texto publicado en redes sociales que será un honor acompañar a la primera presidenta de México; Claudia Sheinbaum a concretar el sistema de salud pública, pero ojalá no se tarde mucho y que; principalmente transparente los recursos ejercidos, pues la Auditoría Superior de la Federación, le ha detectado inconsistencias graves en su administración.
Con su nombramiento se concretó lo que el chiapaneco venía presumiendo desde hace muchos días y que la analista política Lourdes Mendoza de El Financiero, documenta muy bien al señalar que el funcionario de Salud, presumía a sus cercanos colaboradores su ratificación en el cargo, pese a las observaciones de la ASF.
En un texto publicado el pasado 17 de julio, Mendoza habla de los recursos observados por la Auditoría Superior de la Federación que no se han podido comprobar por Robledo y sus asesores y que tienen que ver con el desaparecido Seguro Popular.
En la investigación de la periodista refiere que en el Presupuesto de Egresos de 2019 Hacienda eliminó el programa Prospera y creó el programa U013 denominado Programa de Atención a la Salud y Medicamentos Gratuitos para la Población sin Seguridad Social Laboral, especialmente en regiones de alta marginación.
Explica que para ello; la Secretaría de Salud federal destinó al programa IMSS-Bienestar la cantidad de mil 342 millones de pesos para el programa U013, recursos que cuando fueron revisados por la ASF para verificar el cumplimiento al IMSS, con el hecho de que este recurso fuera destinado a los más pobres de este país y…Cosa rarísima, nadie supo a dónde fueron a parar estos mil 342 millones de pesos.
Según la investigación también se encontró un manejo inapropiado de cuentas bancarias, inexistencia de evidencia del registro presupuestario de los ingresos del programa U013, así como de los intereses generados. No se encontró documentación de los pagos ni comprobaciones del gasto para una partida específica de 527 millones de pesos correspondiente a “Medicinas y Productos Farmacéuticos” (vacunas), entre otras.
Esto generó, según la ASF, una observación por daño o perjuicio a la hacienda pública federal por mil 342 millones de pesos por dinero que debería haber sido destinado para dar atención médica y medicamentos gratuitos a los más pobres de este país, hasta la fecha no se ha atendido la observación que incluso ya generó una visita de cortesía al auditor David Colmenares que ha sido acusado de transparentar cuentas, por lo que ya veremos si hay carpetazo del asunto o tiene alguna consecuencia.
En tanto, Zoé Robledo volverá a conducir estos seis años el Instituto Mexicano del Seguro Social.
Con Filo
En silencio autoridades del estado sobre el tema de migración de Chiapanecos al vecino país de Guatemala, cuando antes era al revés. Un tema delicado que abordaremos en la próxima entrega.