Carlos Rafael Coutiño Camacho / F&S
*Elecciones a gobernador
*Tecnología
No es casual que el actor Roberto Palazuelos sea candidato a la gubernatura de Quintana Roo, porque en otros momentos también famosos han sido parte de la política, algunos con ideas y otros sin nada, en este caso no fue de manera fortuita.
El también abogado y empresario, tiene a un personaje que sabe realmente como lograr ganar sin tanto esfuerzo, aunque hay que moverse muy bien, se trata de Manuel Velasco Coello, un personaje que incluso se reta con el presidente Andrés Manuel López Obrador y que le ha puesto zancadillas fuertes.
Ha hecho lo que ha querido en la política, supo manejar a Peña Nieto y al mismo López Obrador, lo que demuestra su fuerza a pesar de su edad y de su poca por decirlo así, experiencia en la política nacional, pues es berrinchudo y un demonio cuando se enoja que puede causar problemas.
Pero el tema es que Palazuelos, con este asesor podrá ganar fácilmente la gubernatura, ya que esa entidad, tiene dos puntos a favor, uno que la pobreza existe a pesar de tener el paraíso turístico, donde además el narcotráfico ha hecho de las suyas de una forma inteligente en todos los sentidos.
La otra, es que Quintana Roo, ha sido ya un laboratorio de los chiapanecos como sucede en Puebla, luego entonces la mesa está servida para quien será uno de los gobernadores que estará a disposición de Velasco Coello, en caso de no ganar la gubernatura de Chiapas nuevamente para su gente.
El partido es lo de menos, esa es otra negociación que ha hecho su líder, pues se lo impusieron a cambio de dividendos que suele darse en la política, no todo es dinero, el poder es un punto que deslumbra a cualquiera.
El actor, abogado, empresario y ahora político, por la primera característica sin duda le irá bien, de hecho se puede decir que lleva un 40 por ciento adelante sin que se haya dado inicio de manera formal las campañas, el ser actor lo hace conocido y lo hace más que candidato, lo hace ganador.
El problema es la realidad que tiene que afrontar por la denuncia de la periodista Lydia Cacho, que no es un asunto menor, por el contrario, preocupa que esté involucrado en un acto criminal, pero volvemos a lo mismo, la política es exactamente eso, una forma criminal de actuar.
Manuel Velasco no le importa vender al PVEM, lo que le urge es ganar Quintana Roo, Chiapas y posiblemente otros 2 estados más o tener fuerza, para así afianzar su intento de candidatura y poner nervioso a los altos mandos de Atlacomulco, quienes saben que el güero si es un peligro.
Velasco Coello no solo es Senador, es también un arma peligrosa para cualquiera desde el lugar que está, lo está demostrando en varias entidades, saben su negocio del dinero y saben cómo conseguir poder político, si a eso se suma que le persigue grupos delincuenciales que quieren que llegue, es peor la cosa.
Roberto Palazuelos, no es solo una imagen, es un camino para la continuidad de la política del meco chiapaneco y de consolidar más allá de unas gubernaturas, es pensar ya en la Secretaría de Gobernación, aunque el problema será el presidente, pues está palomeado Marcelo Ebrad y será difícil que ponga a una persona salida del PVEM o Movimiento Ciudadano.
Si Marcelo se convierte en presidente como todo apunta, entonces las aspiraciones de MC y PVEM se vendrán abajo, de ahí que les urge ganar más espacios para así dominar los estados y ser determinantes en el Congreso de la Unión.
TECNOLOGÍA
Aunque México y en particular Chiapas, estamos a un “año luz” de la tecnología, lo cierto es que nos alcanzará y de qué manera, preocupa sobremanera porque, el pensar que en la actualidad hay un 40 por ciento de desempleo y que puede llegar aumentar hasta en un 60 si los empresarios empiezan a notar lo que viene.
Como ejemplo en los medios de comunicación ya hay robots que son conductores de noticias, a eso hay que sumar que en las tiendas de ropa, se está computarizando, se habla de que los taxis serán sin chofer, habrá médicos y enfermeras robots, lo que hace pensar que pasará con los humanos.
Dejamos la revolución industrial que fue un golpe terrible para los trabajadores, pero hoy afrontaremos la revolución tecnológica laboral, entonces si habrá que lamentar todo, pues las carreras en universidades no servirán de mucho, por el contrario, empezarán a desaparecer por este fenómeno.
Las máquinas si son un problema, no son una broma ni una ilusión hermosa, tampoco es para aplaudir, hay que ver que muchos empleos desaparecieron por la misma tecnología, la modernización da el adiós a miles de personas que no saben qué pasará con ellos y de que van a vivir.
La pregunta viene ¿qué tipo de trabajo o como será esa vida de los humanos de ahí en adelante?, aunque si habrá que tenerlos en los trabajos, también es cierto que se reducirá por lo menos en un 50 por ciento o más en algunos casos, esto no es como los Supersónicos, aquí no hay vida fácil ni perezosa, será más castigado aún.
Aunque hay trabajos que se niegan a morir, como el cartero, telegrafistas, jardinero, trabajadoras del hogar, ente otras que poco a poco van dejando de existir al menos en número, lo que hará que las cosas pasen de una manera impresionante en no más de 10 años y otras quizá en 5.
Hay que pues, prepararse para lo que viene, porque solo la capacitación hará posible mantenerse pero al mismo tiempo la creatividad será importante para formar no solo APPs sino modelos de negocios y otras cosas que se conviertan en una necesidad para la sociedad; los empresarios serán los primeros que estarán atentos a ello y desearán comprar todo lo que les represente beneficio a futuro.