* Armando Zúñiga Salinas, presidente de COPARMEX CDMX advirtió que la educación debe ser considerada una actividad esencial y convocó a los padres de familia a denunciar si se incumplan los protocolos de acción contra el Covid-19
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La COPARMEX Ciudad de México exhortó a todos los actores sociales y políticos, a los gobiernos, al personal educativo y sociedad en general a procurar que este regreso a clases presenciales “se lleve a cabo de una forma responsable, asertiva, disciplinada y, sobre todo, en donde se privilegie el bien común”, evitando la polarización y la politización de la medida, “para salvaguardar a nuestro tesoro más importante como sociedad, el bienestar de nuestras hijas e hijos”.
Abrir las escuelas a clases presenciales en un nuevo pico de la pandemia no fue la decisión más acertada al realizarse sin condiciones generales de salubridad e infraestructura necesarias, expresó el presidente del Centro Empresarial de la Ciudad de México, Armando Zúñiga Salinas, porque de no hacerlo bien, se estará poniendo en riesgo innecesario la vida de los niños, las niñas, los adolescentes, los trabajadores del sector educativo, así como a las familias.
Sin embargo, el presidente de COPARMEX CDMX aceptó que “todos queremos y deseamos una reactivación integral de nuestras vidas” y el regreso a clases presenciales en sus distintas modalidades, “además de ser una decisión clave para revertir el rezago educativo como consecuencia de la pandemia y para mitigar los efectos socio emocionales en niñas, niños y adolescentes tras el confinamiento, puede ser otro de los motores de la economía que impactará a otros sectores hoy fuertemente perjudicados”.
Por lo que destacó, la educación debe ser considerada una actividad esencial y convocó a los padres de familia a revisar que existan las condiciones necesarias para el regreso a clases presenciales y exigir a las autoridades el cumplimiento de dichas condiciones y protocolos, de lo contrario denunciar por los canales idóneos y evidenciar donde dichas reglas se incumplan.
Agregó Zúñiga Salinas que la pandemia del Covid-19 nos tomó desprevenidos a todos y por la falta de políticas eficaces para combatirla de inmediato, nos está dejando nuevas enseñanzas y, sobre todo, un futuro de cambios a los que, sin duda, nos debemos adaptar de una manera responsable y avanzar bajo directrices asertivas, claras y transparentes.
Por su parte, Patricia Gánem Alarcón, presidenta de la Comisión de Educación de COPARMEX CDMX realizó un recorrido por los perjuicios socioeconómicos, socioemocionales y de salud producto de la pandemia, donde 348 escuelas cerraron sus puertas y 98 mil 752 estudiantes abandonaron el sistema educativo sólo en la Ciudad de México; la necesidad de poner atención en la salud mental de maestros y alumnos porque pronto aparecerán depresiones, angustias, ataques de pánico y otros problemas, así como evitar el incremento de contagios y defunciones en la población escolar donde hubo 63,239 casos de contagio o sospecha y casi el 10%, 613, fallecidos entre el 12 de abril de 2020 y el 8 de agosto de 2021.
COPARMEX CDMX dio a conocer estadísticas educativas preocupantes en la Ciudad de México, como la pérdida del 7% de las escuelas particulares, el abandono de 16% de alumnos y el 11% de docentes, como resultado de un manejo poco adecuado de la emergencia sanitaria y los nulos apoyos al sector productivo para una reactivación económica más eficaz.
Además, se lamentó que a nivel nacional las alumnas que abandonan la escuela hayan sido para incorporarse al mercado laboral o atender labores domésticas, mientras los jóvenes varones abandonan sus estudios para integrarse al mercado laboral, siendo que las opciones de empleos formales son cada vez más complicadas y se tengan que dedicar a actividades informales, asumiendo la incertidumbre de ingresos, la exposición a contagios y la ausencia de un esquema de protección de salud.
Al respecto, Patricia Gánem dio a conocer una serie de acciones, protocolos contra el Covid 19 y de regreso a las aulas, además de poner puntual atención para ofrecer “la más amplia protección posible de las maestras y los maestros, así como un apoyo amplio para que puedan realizar su trabajo en las mejores condiciones”.