Este martes habitantes de diversos ejidos en el municipio de Frontera Comalapa se unieron en una marcha pacífica con el objetivo de exigir paz y seguridad para su comunidad. La movilización, que se extendió desde el desvío Nuevo México hasta el Parque Central de la cabecera municipal, fue una demostración masiva de rechazo a la creciente ola de violencia que azota esta región fronteriza con Guatemala.
Vestidos de blanco, hombres, mujeres y niños caminaron unos seis kilómetros, portando carteles y lanzando consignas que expresaban su desesperación ante la inseguridad que ha desplazado a más de tres mil personas, según datos del Centro de Derechos Humanos Digna Ochoa. Los ejidos participantes, como San Juan Carisal 1, Nueva Revolución, Nuevo Mazapa, Costa Rica y Santa Rosa, provenientes de zonas consideradas de alto riesgo, exigieron la intervención urgente de las autoridades para garantizar su seguridad.
Uno de los principales reclamos de los manifestantes fue la mejora en la vigilancia y seguridad de los tramos carreteros federales, particularmente en la ruta que conecta Frontera Comalapa con Motozintla y la cabecera municipal de Amatenango-Mazapa de Madero. También demandaron una mayor presencia de las autoridades en la carretera Chamic-Trinitaria hacia Comitán, donde en semanas recientes se han registrado numerosos robos y desapariciones.
En un mitin frente al Palacio Municipal de Frontera Comalapa, los manifestantes hicieron un llamado a la intervención de la Guardia Nacional y el Ejército Mexicano para restablecer la paz en el municipio y sus alrededores. Subrayaron la importancia de recuperar la seguridad no solo para los residentes locales, sino también para reactivar zonas turísticas como los Lagos de Colón y Los Laureles, que han visto una disminución significativa en el número de visitantes debido a la violencia.
Un momento particularmente emotivo ocurrió cuando mujeres, familiares de personas desaparecidas en la carretera Comalapa-Chamic, alzaron pancartas con las fotografías de sus seres queridos, mayormente hombres, cuya búsqueda aún no ha rendido frutos. Con lágrimas en los ojos y voces firmes, exigían: «Vivos se los llevaron, vivos los queremos».
De acuerdo con cifras oficiales de la Fiscalía de Justicia de Chiapas, desde 2022 hasta marzo de este año, se han reportado 59 personas desaparecidas en los municipios fronterizos. En Frontera Comalapa se contabilizan 24 desapariciones, mientras que en Comitán se reportan 20, en La Trinitaria 13, en Amatenango de la Frontera 5, y en Chicomuselo 1. Sin embargo, los familiares de las víctimas aseguran que el número real de desaparecidos es considerablemente mayor.
La marcha se realizó tres meses después de un enfrentamiento armado entre grupos criminales en el municipio vecino de Chicomuselo, que forzó a varias familias a huir hacia Guatemala. Durante la movilización de este martes, Esnaider, uno de los participantes, expresó: «Hoy vestimos de blanco para exigir paz. Queremos seguridad en nuestro pueblo, y estamos unidos para reclamarla. Aunque no haya mucha vigilancia, ya estamos aquí, juntos, exigiendo tranquilidad para nuestras comunidades».
A pesar de la contundente presencia de ciudadanos en la manifestación, no se observó la participación de elementos de la Guardia Nacional ni del Ejército Mexicano, lo que ha generado malestar en la población, que ve con frustración la falta de respuesta a sus reiteradas demandas de seguridad.
Cabe destacar que, debido a la situación de violencia, el pasado 15 de septiembre no se celebró el tradicional Grito de Independencia en Frontera Comalapa, lo que evidencia el nivel de inseguridad que prevalece en la región. La población sigue esperando acciones concretas por parte de las autoridades para restaurar la paz en su municipio.
vía: Argenis Esquipulas